La vía dolorosa.

June 25, 2007 at 5:25 am 2 comments

Ulises, si no vuelves no habrá valium que me salve! Ya lo tengo bien pensado. Toda historia debe tener su fin, tarde o temprano.

No más caracolas que expelen dragones y serpientes. No más ratas y cloacas. No más escondrijos con espadas voladoras que amenacen con penetrarme. No más polvo, ni colección de telarañas. No más guaridas de fieras para blanca nieves asustadas. Es mejor así, la resaca de llorar hasta escanciar el cauce de las cuencas, la inmisericordia de mi yo fetal arrastrándome al abismo, el cordón umbilical de tu falo pequeñito, el teléfono que cuelga de los árboles y no cesa de timbrarme el tímpano, los pezones que tanto succionabas y que perdieron aureolas. Tu vientre aplastando las tantas estrías del vientre mío, tu lengua sucia, tu olor a marihuana y a perfumito old spice que me da náuseas.

La otra. Siempre en casa de la otra. Aquella enana de monte adentro que conociste en el Bar de Doña Herminia, la que te hizo brujería, la que te ha achacado un hijo que es de otro, para engatuzarte.

Que se vaya todo. Los ojos no tienen porque ver otro equinoccio. Debe quedar lejos toda esta cochambre hostíl, el olor almidonado de tu semen aguadito, la pelambre de tu pecho, tus ojos de amarillo fúnebre, perdidos en odiseas baratas de otros años, las latas de cervezas a medio beber en todos los rincones. Las tardes de carne asada y fútbol de segunda división en la tele, compartidas con esa horda de borrachos que me tocaban las nalgas a tu espalda.

Si el valium no me salva, talvez algún veneno se preste a hacerme la jugada. Eso sí, lo único que lamento es que cuando ya no tenga memoria de todo lo que fui a tu lado, cuando me declaren moribunda en la morgue de ese hospital de mala muerte, ya no habré de enterarme que tú también has muerto como un perro realengo y callejero, que atropellado en el silencio de la noche, nadie le llorará ni le santiguará las babas del rictus de la muerte. Cuando eso suceda, lamentaré no haber estado viva para decirte: El que la hace la paga, Ulises, así en Itaca, como en el infierno.

Entry filed under: Uncategorized.

La Universalización de lo coloquial y el arte del birlibirloque" en "La rosa y el sudario" de Pedro Antonio Valdez Cábala y mujer.

2 Comments Add your own

  • 1. Francisco Ortiz  |  July 5, 2007 at 6:50 pm

    Palabras que suscribirían muchas mujeres, me temo, porque parece ser que hombres -dicen- quedan cada vez menos. Hombres de verdad. PD: Buen texto, buena metralla, buena ironía, buen surrealismo y buen realismo duro y directo al lugar en que ha de haber mente y corazón. Y sabes que te admiro, Ninoska.

  • 2. Anadell  |  July 7, 2007 at 3:26 am

    me gusta la forma tan especial que tienes de describir, tu expresion es muy interesante.

Leave a comment

Trackback this post  |  Subscribe to the comments via RSS Feed


Calendar

June 2007
M T W T F S S
 123
45678910
11121314151617
18192021222324
252627282930  

Most Recent Posts